jueves, 26 de enero de 2017

Hablando de: Leer y…



Pues sí, hoy me pongo algo dispersa y concreta a un tiempo.  Dependerá de por dónde me de el aire cuando apriete la tecla.
Veamos qué sale  del experimento

De pequeña, creo que ya lo he comentado en más de una ocasión, no leía casi nada. Prefería estar con la bici o haciendo otras cosas antes que sentada y con un libro abierto.  Luego a los 12, comenzó la fiebre.
La lectura tiene muchas caras, las descubres según pasan los años. A veces es un vicio que se te mete en el cuerpo y te lleva a la loca idea, de ir a parar a una carrera de letras ante el estupor de esos adultos que ya te ven inmerso en un futuro casi indigente.  Pero la literatura llama, las vidas de los autores, el poder de la historia en sus páginas, el retrato del mundo en sus líneas, los modos de escapar de censuras y gobiernos, las trampas del destino y los triunfos postreros… Sí, leer lleva un veneno dentro de consecuencias imprevisibles.

Pero desde que estoy en esto de internet, me he topado con algunas cosas que hacen que tenga ganas de retirarme a mis aposentos.  Cosas bastante absurdas y que poco tienen que ver con el amor a los libros.

-No hay que leer despacio.  Lo mejor es leer  veinte libros al mes y reseñar veintiuno.   Vamos, que se recupera esa actividad ya realizada en el instituto el día antes del examen de leer en diagonal.
No se, pero para quien gusta de leer y enterarse de lo que lee, tenga el libro 200 o 500 páginas, esta es una actividad que no termina de cuajar del todo.
Muchos me dirán que aquí cada cual tiene su ritmo lector, su velocidad,  Yo misma me he leído un libro en un día, pero eran libros ligeros, sencillos. Si intentas leerte un libro de 400 donde la mayor parte no es diálogo, la cosa se pone peor.  ¿Será por eso que ahora a tanta gente le molesta tanto las descripciones?...

-No hay que leer variado.  Eso es malo, mucho. Si lees de todo no puedes seguir a una editorial determinada y lo peor de todo, ella no te sigue a ti  ya que no entras dentro de sus intereses. Qué cosa peor hay en el mundo que un lector que sea capaz de leer todo tipo de géneros.  Vamos, algo inconcebible.
Lo mismo ocurre con algunos escritores, no valoran igual a lectores solo del género que ellos escriben, que a otros cuyo arco sea más amplio.  Parece que esto resta credibilidad a su criterio.  Qué cosas.
Te recomiendan, casi de las primeras cosas, que te especialices, que elijas un género y de este sea del que publiques las reseñas.  Y yo pregunto: y si de romántica leo uno al mes ¿solo publico una vez al mes? (esto es válido para todos los géneros).  Según parece este es el método para que te sigan y valoren autores y editoriales.  Curioso.

-Leerás a autores que no sabes si leen.  Pues sí, esto aunque a muchos les moleste, es bastante real.  Libros con erratas, faltas, incoherencias, errores de documentación (lo que demuestra que ni siquiera han leído para documentarse) y otros que dicen que Romeo y Julieta es una novela romántica (por no hablar de aquellos que desconocen a "grandes" del género del que escriben).

-Leerás a autores que habiendo leído, te tratarán como si tu no lo hubieras hecho.  Esto es algo muy curioso y que me choca casi más que lo anterior.  Autores con carreras de letras, que saben de construcción de personajes y tramas, creando historias donde dejan cabos más que sueltos.  Me hace pensar, para qué público escriben en realidad.
Por supuesto que estudiar una carrera no te da la capacidad de escribir, eso es obvio, de ser así todos los licenciados habrían publicado.  Lo que si te da, es un mínimo criterio para saber si algo está bien construido.  Si esto lo tienes ¿qué te hace pensar que el público al que destinas tus libros merece menos?

-No importa argumentar, importa halagar.  La argumentación no vende, vale mas un halago y una palabra simpática para contentar a todos.  No importa que no seas tu mismo a la hora de expresarte.
Aquí de nuevo hago un inciso para romper una lanza por todos aquellos que valoran los libros y su mundo por encima de otras cosas.

Podría seguir, pero tras un tiempo he decidido que no merece la pena,  no va a cambiar nada ya que son demasiados jugadores.  Este mundo de la red es tan grande, tan inmenso y como dice aquél "cada uno somos de nuestra madre y nuestro padre", con nuestros defectos y virtudes (de los primeros tengo muchos, de las segundas habrá un par).  

Por mi parte, prefiero ir a lo mío viendo lo bonito que hay, que es mucho:

-Hablar de lo que me gusta.  Los libros que me emocionan, las series, pelis.  No soy capaz de leer veinte, mi tiempo y vida son los que son.  Así que, con tranquilidad.
Elijo los libros según me cuadra, a veces haciendo caso a novedades, otras a impulsos, otras a la vergüenza que me da ver libros en mis estanterías que llevan allí años olvidados.
No busco rapidez, o si lo hago que al menos la lectura me aporte algo, no solo una meta en Goodreads.

-Compartir con gente interesante.  ¿Sabéis la de gente que hay por aquí que merece la pena? Gente con la que hablar de todo, de libros, del mundo. Gente que no busca que le digas que hoy está de muerte, o que es lo mas inteligente del mundo.  Gente que es lo que es.
Hay autores que aun quieren opiniones sinceras, no solo halagos (pero no les hacen ascos tampoco, que el ego de un autor es una cosa frágil y eso es algo que no hay que olvidar)

-Conocer autores que pelean por cada linea.  Esto lo he descubierto estos años.  Al igual que antes no lo tenían fácil y muchos publicaban en revistas semanales, hoy algunos de muy buena calidad se ven autopublicando, levantando ellos mismos sus libros poco a poco, mirando en manuales de maquetación, ortografía, reglas...Los que publican con editoriales pequeñas se llevan un margen mínimo y aun siguen, pese a que muchos no tienen el respaldo de un sello mayor.  Personas que aman lo que hacen, que se documentan incluso para historias que muchos lectores verían innecesario.  Autores que debido a las modas se quedan fuera,  otros cuyo estilo no casa con lo que una editorial mete en una etiqueta determinada y que terminan sin saber qué hacer.
Esto te hace ver lo que merece la pena.

- Aprender y descubrir.  Descubrir historias, lugares, emociones… No cerrar las puertas a libros por prejuicios tontos,  Gracias a blogs y administradoras, he conocido cosas que de otro modo no hubiera leído.  Hay sitios que dejan a un lado muchas modas y se acercan a otros lugares donde también merece la pena ir.

Conocer amigos, personas con la que coincides en gustos y con las que, si hay suerte, podrás hasta tomarte un café de vez en cuando.

- Amar aun más el mundo de los libros, el de verdad, el que se esconde detrás de las pastas de un libro, entre las letras.  Ese que tiene poco que ver con tuits, retuits, me gusta, montajes de fotos o intereses creados.
-

Como he dicho al principio, leer es algo maravilloso que te puede traer cosas que solo descubres a lo largo de tu vida.  Así que por mi parte, me centraré en lo importante olvidando el ruido molesto.
Leeré a gente que ama lo que hace, que aporta luz a este mundo de las letras, esos que nos muestran la vida como es, o que la llenan de magia, o algún clásico que muchos conocen solo por la televisión y que en realidad no son tan temibles, también historias que sin ser maravillosas  me ayudan a pasar tardes tontas.  El caso es leer y saber que, en el fondo, no estamos solos.

¿Leemos?


Estantes de papel