jueves, 6 de julio de 2017

Reseña: El último baile de Marisa Sicilia







Título: El último baile
Autor: Marisa Sicilia
Editorial: Harlequin
Género: Romántico Histórico

Sinopsis

Viena, 1952
Andreas y Lilian se reencuentran inesperadamente en un café tras una larga separación. Mientras pasean juntos por el Prater, Lili recuerda su historia de amor con Andreas, su enamoramiento incondicional y juvenil, el primer desengaño, el fracaso en su intento de olvidarlo, la reconciliación y los años locos que vivieron juntos en el salvaje Berlín de entreguerras.
Recuerda cómo, a pesar de las separaciones y las distancias, nunca dejaron de amarse. Porque el de Lili y Andreas es uno de esos amores que perduran a través del tiempo y las pruebas.
Porque las verdaderas historias de amor nunca terminan

Opinión
Como es sabido, Marisa Sicilia es una de mis autoras favoritas pero cuando supe que escribía un libro ambientado entre Austria y Berlín, la felicidad llegó a cotas altísimas.
Es cierto que he tardado mucho en leer la novela.  Entre tanto han pasado presentaciones, reseñas de gente en la que confío mucho, firmas…parecía que no lo leería nunca. Pero como suele suceder, esperar el momento adecuado tiene su recompensa y esta ha sido grande.

El ultimo baile me enganchó desde las primeras páginas con ese “lo recuerdo todo” que dota de cierta nostalgia y desafío a todo lo que viene después.  A mi, me hicieron enfrentarme con ganas a una historia que me pareció cruel en muchos momentos y preciosa en otros.

Lo que más aprecié fueron sus personajes.  Con Lily tengo mis problemas, por Andreas siento una infinita lastima y luego está aquél que no esperaba y que me rompió el corazón.  Hay más, por supuesto, pero estos son mis tres personajes, con los que me quedo, los que me han hecho “pegarme” con la historia.

Romanisches Café
Una historia que comienza tranquila, como un cuento, con su baile y su princesa soñando con su príncipe.  Un príncipe que tiene sueños que no incluyen princesas pero sí vida, pasión, esperanza, amor.  Lily y Andreas son iguales y distintos a la vez, quieren vivir y amar, solo que ven las cosas de manera distinta. 
Son esos primeros años de cierta tranquilidad, donde lo que importa es el amor de Lily pese a que ya se ve cierta turbulencia en el mundo.  Esa época en la que Lily está inmersa en su burbuja de sentimientos donde Andreas es lo más importante. Un Andreas que tiene sueños de crear algo maravilloso y donde el amor, al nivel que quiere Lily ,no tiene lugar.  Y es esto lo que marca la relación de ambos en el devenir de los años y les hace tomar decisiones a veces no tan acertadas.

Mas tarde, viajamos  de Austria a un Berlin alegre donde todo podía pasar.  Un Berlin de cabarets y noches eternas, para luego ir pasando poco a poco a ese otro Berlín de los cristales rotos y los gritos.  Un Berlin, donde los sueños de muchos terminaron hechos añicos.

La capacidad de la autora para recrear la parte histórica, dando pinceladas, pero hablando claro de quien era quien, es de lo mejor de la novela.  No es fácil de retratar ese momento y hacerlo de manera sencilla,  de modo que la situación por la que pasa Alemania quede clara.  Esto muy importante ya que afecta directamente a la trama y a los personajes.

El último baile habla del amor, de las oportunidades perdidas, de las que la vida arranca, de las decisiones tomadas, de las que vuelven, de las que se van.  Pero también habla de secretos, de aprendizaje, de aceptación, de lucha, de crecimiento, de dolor, de dejar ir...   Los personajes me gustan porque me parecen reales, sus decisiones son comprensibles sean estas buenas o malas, me caigan bien o me caigan mal.  La época en la que la autora les sitúa no es sencilla y ellos hacen lo que pueden.

¿Qué decir en cuanto a Andreas y Lily? Bueno… Como siempre los personajes es de las mejores cosas de la novela.  Están bien montados, son coherentes, completos, lógicos en sus actos.  Te pueden gustar más o menos, pero narrativamente hablando no les puedes poner pegas.  
Lily es  desde el principio, una mujer de su época.  Criada para casarse, hija y víctima en ocasiones de las tradiciones mas arraigadas de su época (la conocemos en un baile de presentación), sueña desde niña con el amor de Andreas,  casarse y una vida tradicional.  Es el destino, la historia, la negativa de Andreas, lo que le pone delante las dificultades y los retos.  En muchos momentos me desesperaba con ella y deseaba que espabilara antes, pero es cierto que no solo estaba sujeta a la época, también a su estatus social que la mantenía aun mas atada.  Cuando por fin despertó lo celebré con ganas.
Andreas es para mi, pese a la opinión de otros lectores,  mi favorito de la pareja.  Un soñador que quiere hacer algo especial, quiere salir de esa tradición, avanzar, adora la arquitectura que empezaba a nacer y quería crear algo distinto.  Su sueño fue su motor y perdición a la vez y eso le sucedió a tantos...  Los soñadores, los artistas, los diferentes, fueron carne en aquella época y quizá por esto Andreas me ganó.
Luego tenemos a un personaje del que no diré mucho, Ernst, solo que me robó el corazón por muchos motivos y que demuestra en cierto modo, lo que Lily tuvo que crecer, aprender y lo tarde que se dio cuenta de sus errores en muchas ocasiones.

El último baile ha sido una gran novela, no se si la mejor de la autora (le anda cerca), pero si una lectura que me ha llevado por muchos sitios.  Que me ha llevado a una época que me encanta por lo fascinante, con unos personajes reales, que luchan , aprenden, sienten y que espero aprovecharan ese último baile.

Gracias de nuevo, Marisa Sicilia

Estantes de papel