lunes, 18 de mayo de 2015

¿Por qué leo Novela Romántica?- Reflexionando tras conocer a Susan E. Phillips


El día 13 de mayo tuve la suerte, gracias al RNR, de asistir a un encuentro con Susan Elizabeh Phillips, una de las autoras más reconocidas dentro del mundo de la literatura romántica.  Me encontré con una persona profesional, cercana, con un sentido del humor excelente, amante de lo que hace y una ferviente defensora de este tipo de novelas. 
La autora habla de una literatura de mujeres, de cómo los hombres siempre han menospreciado ese tipo de libros donde  las mujeres creaban mundos en los que eran capaces de hacer cosas por ellas mismas, mundos en los que pensaban por sí mismas.  Esos libros escritos por mujeres, que no necesariamente deben ser leídos solo por mujeres, pero que casi siempre es así.







Escuchar hablar a alguien de una manera tan emocionada de este tipo de libros hace que, aunque no estés de acuerdo con ella en todo lo que dice, te pares a pensar en sus razones y replantearte las tuyas.

Susan asegura que la vida es muy corta para leer historias tristes o que acaban mal, por esto afirmó entre risas que no le gustaba “Cumbres borrascosas”.  Esta es una opinión bastante extendida entre las lectoras de romántica, a muchas no les gustan los finales tristes y por eso solo leen este género.  En esto disiento, a mi no me molestan los finales tristes o no tan felices.  Quizá por eso, “Cumbres borrascosas” me parece una maravillosa historia de amor enfermo entre dos personas perversas y como tal, no puede terminar de otro modo. 

Realmente, cuando leo romántica busco una historia con un final bonito pero no solo eso.  Busco un trama entretenida, con algo de aventura, algún misterio, humor, personajes completos, bien documentada… Y por supuesto, que el final sea lógico, no me vale un final feliz sin pies ni cabeza.  Si somos sinceros, esto es básicamente una novela romántica: una novela con una historia de amor como eje central y en torno a la que  se desencadenan los acontecimientos y, por supuesto, con un final feliz.  Parece sencillo pero no lo es.

-Pero ¿qué me aporta leer este tipo de novelas?
Esta pregunta me la han hecho en alguna ocasión y resulta bastante gracioso.  ¿A un lector de novela negra se lo preguntan? Yo me preocuparía por saber si la respuesta es “pues me aporta saber qué tipo de arma tengo que usar para matar a 20 personas en un restaurante”. 
La novela romántica me aporta lo que cualquier otro tipo de novela.  Leer entretiene, enseña, da vocabulario, amplia la mente, consuela cuando estás en un mal momento, distrae de un día malo… Eso lo proporciona cualquier tipo de novela y la romántica también.
Por supuesto que dentro del género hay libros mejores y peores, autores que cuidan más la escritura que otros, que se documentan más.  Algunas novela históricas tienen una documentación cuidadísima, mucho más de lo que la gente se pueda imaginar, pero quizá queda escondida tras la historia que relata.  Las escritoras consultan bases de datos sobre las ropas que se usaban, la ubicación exacta de cementerios, los usos legales, el lenguaje correcto de determinadas épocas…
Hay una especie de prejuicio o mito sobre la baja calidad de este tipo de libros que cada vez tiene menos sentido.  Aunque bien es cierto que las últimas modas no están ayudando demasiado, hay suficientes muestras de la calidad que podemos encontrar.


Me resulta gracioso como mucha gente se lanza a criticar un género sin leerlo, o simplemente se niega a admitir que lo hace.  ¿No es chocante que durante esta crisis de ventas uno de los géneros que menos haya mermado sus ventas sea la romántica? Pues así es.  Y digo que me choca porque mucha gente no admite leerla. 
Comparto el sentimiento sobre aquellas vergonzantes portadas de parejas en posturas casi de contorsionista y de lomo rosa chicle. Aunque ahora me resultan tan kitsch que me gustan y todo (empezaré a desvariar).  Pero esto ya no se lleva y las portadas cada vez están mas cuidadas.
En el terreno nacional, tenemos grandes autoras en cualquier apartado de la romántica (histórica, paranormal, actual...) y es una gozada leer libros que empiezan a estar ambientados en este país, para variar un poquito.
Solo hay que saber buscar y darse cuenta de que, como en todos los géneros, hay de todo.



- Ains... esos libros, esas modas
No voy a ser tan predecible de cargar las tintas contra "50 sombras de Grey", ya que mi opinión es que mucho de lo que ha venido después es peor y no ha tenido tanta repercusión.
Las modas son un fastidio y lo malo de esta es que o bien dura demasiado, o ha venido para quedarse.

Volviendo a Susan E Phillips, a la pregunta de  si no resultaba machista la idea de que la mujer curara siempre al hombre dañado.  Ella respondió que sus libros hablaban de un "amor bueno, sano", ese tipo de amor que hace crecer a ambas personas.  Y si, en sus libros había sexo, pero no pensaba hablar de ello allí (hubo muchas risas).


En lo anterior tengo yo el problema, mi tema no es el sexo, algo que me da bastante igual.  Mi problema es que se pretenda vender como algo romántico y sano una cosa que no lo es.  Creo que ultimamente hay una tendencia un tanto preocupante y de eso es de lo que huyo como la peste.
Como ya he dicho antes, a  mi dame aventuras, diálogos ágiles, parejas con garra, peleas sanas, finales lógicos y seré la lectora mas feliz del mundo.  Me importará un pito que sea en la época victoriana, en Nueva York años 20 o ayer mismo, que los protagonistas tengan colmillos, estén llenos de pelo o vete tu a saber qué mas.  Solo quiero una buena historia y hacer eso no es tan fácil como muchos creen y desde luego tampoco es cuestión de modas.

-¿Solo romántica?
En mi caso no.  Respeto enormemente a los lectores de un solo género, pero yo no puedo.  Del mismo modo que no podría leer solo fantasía, thriller o cualquier otra cosa.
Las novelas románticas me gustan, pero si solo leyera ese género no habría conocido a Marian Keyes o a Kinsella, no habría disfrutado de “El señor de los anillos”, ni de “La casa de los espíritus”, de “El húsar en el tejado” o de “Yo antes de ti” por decir algunos.  


Así que sí, leo novela romántica, disfruto la novela romántica.  Aplaudo y admiro a sus escritores y espero que sean respetados por su trabajo, porque lo que escriben es tan valioso como cualquier otro género.   Pero no puedo dejar a un lado los finales duros, las tramas no amorosas y realistas, o los mundos de fantasía, todo eso forma parte de lo que necesito en mis estanterías y cuanto  mas variadas sean mas sabré apreciar lo que contienen.  


Resumiendo


Y por muchos años

Hasta otra!!!!






*Foto de Susan E Phillips extraída del Facebook de la autora