lunes, 28 de marzo de 2016

Reseña: El secreto de Christine de Benjamin Black






Título: El secreto de Christine (Quirke 1)
Autor: Benjamin Black
Editorial:  Alfaguara
Num pags: 392


Sinopsis
Dublín, años cincuenta. En un depósito de cadáveres, una turbia trama de secretos familiares y organizaciones clandestinas comienza a desvelarse tras el hallazgo de un cuerpo que nunca tendría que haber estado allí. Una oscura conspiración que abarca ambos lados del Altántico y que acaba envolviendo en un siniestro abrazo, inesperadamente, la vida misma de todos los protagonistas.



Opinión

Llevaba tiempo queriendo leer algo de este autor, ya fuera como John  Banville o como Benjamin Black, al final la llamada de la novela negra ha decidido.  Ahora, gracias al reto de Irlanda, he tenido la oportunidad.

En El secreto de Christine, el autor nos lleva por las calles de un Dublín bastante oscuro, lleno de esa moral de una época en la que había que guardar los secretos vergonzantes, donde los católicos y protestantes jamás se mezclaban y los poderosos echaban mano de matones.

Estamos ante la primera novela de una serie y eso se nota en cierta medidaEl autor se toma su tiempo en presentar al que será el protagonista de la misma, Quirke, un patólogo forense de pasado duro y  carácter propio del género.  
El caso, profundamente ligado al entorno del protagonista, ayuda a esta presentación y  además, nos lleva de la mano para adentrarnos en ambientes no solo de Dublin, sino también de la lejana Boston.  Aunque ya sabemos todos que EEUU, en cierto modo, siempre ha sido casa de muchos irlandeses.

Desde el primer capítulo me ha enganchado la trama.  Ese comienzo  aparentemente lento, sin demasiada agitación pero con un gran significado, que poco a poco va dando sentido la trama y cercando a todos los personajes, me ha resultado muy interesante y atrayente. 

No estamos ante una novela con un ritmo trepidante, su narración es pausada, descriptiva, reflexiva.  En El secreto de Christine,  importa conocer a los personajes, sus vidas, sus miserias, caracteres, pasados, presentes y motivaciones.  Del mismo modo importan los distintos ambientes de clase, ya que la novela se mueve entre el poder y la miseria. Es cierto, que en algunos momentos se puede hacer un poco pesada precisamente por esa lentitud y precisión en los detalles, pero al mismo tiempo, el retrato que hace de los personajes y las circunstancias es lo que mas me ha llenado. 

Quirke  no es especialmente valiente, ni activo, no es de esos que llaman por su gran atractivo.  Es un hombre criado en un orfanato y recogido por una familia a la que le debe mucho y lo sabe.   Un amor frustrado rige su vida, además de una mujer que ya no está.  Como todo personaje de novela negra, el amor no es su fuerte y los bares, su refugio.  Es en estos bares, donde conocemos a gente un tanto pintoresca de ese Dublín canalla y sucio que tan bien retrata el autor.  (La imagen pertenece a la miniserie de 2014  de 3 capítulos con Gabriel Byrne como Quirke)

Mal, es ginecólogo y compañero en el hospital.  Ambos se criaron juntos, ya que es hijo del hombre que acogió a Quirke, y mantienen una relación un tanto complicada.  Como ginecólogo del hospital,  su implicación en el caso será relevante.  La mujer de Mal es “algo más” en la vida de Quirke y   Sophie, la hija de estos, juega un papel importante en esta tensa relación.  Desde luego, es un tablero de relaciones familiares francamente interesante el que se nos presenta.

Juez Griffin, padre de Mal.  Un hombre poderoso de gran carácter, tiene mucho cariño a Quirke y es consciente de las limitaciones de su hijo.  Al mismo tiempo sabe qué cualquier fallo es nefasto de cara a la sociedad en la que viven.

Christinesu cadáver aparece una noche en la que Quirke está borracho.  Una mujer joven, de pelo rubio teñido cuyo informe de defunción esta falseado y que dará lugar al descubrimiento de muchas mentiras, más de las que Quirke hubiera pensado.

Los secundarios son muchos y variados, pero todos tienen su sitio y su razón de ser.

Benjamin Black no da puntadas sin hilo presentándonos matrimonios insatisfechos, adopciones dudosas, poder tramposo, amores truncados, odios religiosos... Una novela que algunos dudan en calificar de negra debido a su ritmo, pero que para mi claramente lo es por sus ambientes.

"El secreto de Christine" me ha tenido enganchada gracias a su personaje principal, sus ambientes, trama... y aunque haya echado de menos un poco de acción, no voy a mentir en eso, seguiré con la serie.

Estantes de papel