Título: ¿Quién es esa chica?
Autor: Mhairi McFarlane
Editorial: Libros de
seda
Num pags: 416
Sinopsis
¿Qué es lo que hace la novia en una boda? Besar al novio. ¿Y
qué es lo que NO SE HACE EN UNA BODA? Besar al novio de otra.
Cuando a Edie la pillan en una situación comprometida en la
boda de una compañera de trabajo, todas las culpas recaen en ella. Y entonces
se da cuenta de que su nivel de popularidad en la oficina no es muy distinto al
que tenía en el instituto.
Rechazada por todo el mundo y muerta de vergüenza por lo que
se publica en las redes sociales, su jefe le sugiere que se tome un año
sabático. Él ya le ha buscado qué hacer durante ese tiempo: escribirá la
autobiografía de Elliot Owen —escribirá como negra, vaya—, un nuevo actor con
mucho talento. Lo único que tiene que hacer es bajar la cabeza y llevarse bien
con él. Fácil, ¿a que sí? Pues no, porque el tal Owen es un engreído de
proporciones épicas de todo punto insoportable.
Opinión
¿Quién es esa chica? No solo nos recuerda, a los que ya
tenemos una edad, a una canción de Madonna, también es una historia con muchos matices,
referencias a una época, personajes a los que acabas cogiendo cariño y bastante
crítica a una sociedad que hace daño sin miramientos.
Edie se ve sometida por un error, que ni siquiera provoca ella,
a una especie de caza de brujas que la lleva a ser apartada de Londres y
llevada a su ciudad natal para realizar la biografía de un actor de moda. Es en este momento, cuando muchas de las cosas
que más amo de cierto tipo de novela británica, entran en juego.
Esta novela estaba en mi lista desde que salió como novedad
más que nada por su autora, pero cuando me decidí a leerla fue cuando entró
entre las posibles para una lectura conjunta con Lidia del blog Cielos de papel. Luego con la cosa de que la experiencia fuera
más entretenida, metimos en el “lío” a Eme del blog Agora. Y sí, la cosa a estado realmente bien,
tenemos algunas opiniones dispares y eso ha enriquecido mucho la lectura.
Tengo que dar las gracias a ambas por los ratos, cómo me
gustaría que fueran mas y de otro modo. Ya estoy esperando la siguiente
Ahora vamos con la novela.
La manera de reflejar la relación de Edie con su familia, a la que dejó atrás tras irse a la ciudad, es a
la vez irónica y un poco dolorosa. Es
ese humor inglés que gusta a determinadas personas.
La vuelta de Edie a su casa, a sus orígenes y en cierta manera a su infancia y adolescencia, está cargada de referencias (la aparición de los New Kids on de Block, me sacó una sonrisa enorme). Y puede que muchas de esas referencias sean un escoyo para algunos lectores que no estén muy centrados en la cultura británica, aunque bien es cierto que no son muy dificiles de identificar.
La vuelta de Edie a su casa, a sus orígenes y en cierta manera a su infancia y adolescencia, está cargada de referencias (la aparición de los New Kids on de Block, me sacó una sonrisa enorme). Y puede que muchas de esas referencias sean un escoyo para algunos lectores que no estén muy centrados en la cultura británica, aunque bien es cierto que no son muy dificiles de identificar.
Aquí vemos a sus amigos de siempre, su reencuentro con su
mejor amiga, el cambio en sus vidas, cómo llevan todo ahora. Estas cosas, no se la razón, me encanta cómo
lo reflejan los escritores de esta nacionalidad. Trasmiten una especie de verdad y cercanía
que no he encontrado en otras novelas, no esconden lo malo que puede ocurrirle
a una persona. Igual puede irle genial
en el trabajo y entre cerveza y cerveza, contarte que en estos años se ha
acostado con veinte tíos buenísimos, como decirte que también tiene a su madre
en una residencia con Alzheimer. Y qué
queréis a mi eso me gana, es natural y lo agradezco.
Mhairi McFarlane ha
construido una historia bonita y real, con dos personajes que se conocen y se
apoyan. Edie y Elliot pese a las
reticencias iniciales van descubriendo que el uno y el otro merecen la
pena. Que ese actor rarito tiene fondo y
es un hombre al que hay que tener en cuenta y Elliot ve en ella a una persona interesante
que está luchando contra algo que la supera y que siempre ha elegido mal a los
hombres. La personalidad de Edie está marcada
por el suicidio de su madre cuando apenas tenía 9 años, algo que saben pocas personas pero que siempre está ahí. Y el hecho de que exista la complicidad suficiente para que ambos hablen de esta y otras cosas dice mucho de su relación. Una relación pausada, real y muy bonita, por lo menos para mi.
Edie al volver a casa se da cuenta de muchas cosas, sobre todo gracias a un personaje muy especial. Uno de esos personajes “bombón”
que a los escritores les encanta poner y que a los lectores nos roban el
corazón poquito a poco. Este es una
especie de ángel de la guarda pelín irreverente y amante de beber a
deshoras.
También tenemos a la hermana y el
padre de Edie. Dos personajes clave que sufrieron lo mismo que ella, pero lo
afrontaron de otro modo. Las hermanas mantienen una relación enfrentada producto de
mucha incomprensión y el padre es una especie de testigo callado de todo, que
espera que la tormenta pase.
Además hay multitud de secundarios maravillosos, que
provocarán escenas memorables en la novela.
Podría poner ejemplos como cuando por fin Edie canta las cuarenta a
aquel que tanto daño le ha hecho con sus comentarios, las escenas con su jefe, ese
impresentable Jack…
¿Quién es esa chica?
es una novela con una gran evolución de personajes y quien busque eso,
aquí lo tiene. Tiene una gran
narración, con humor, lágrimas y emoción.
Una historia que critica el poder de las redes sociales y el daño que pueden
causar a una persona, la hipocresía de la amistad basada en intereses, el miedo
a la soledad, la familia, lo importante que es ser uno mismo, conocerse,
valorarse… y el amor en todas sus facetas.
Mhairi McFarlane ha
vuelto a demostrar lo que ya hizo en su primera novela, que con una narración
fluida y llena de humor puede tratar temas importantes y hacer que el lector
pase un buen rato. Desde luego una de
mis escritoras a tener muy en cuenta.