Se que esta entrada llega pelín tarde. Debía haber sido publicada por diciembre o
principios de enero, pero estoy un poco rara, vaga o vete tu a saber. Así que aunque tarde, aquí está
2017 ha sido un año complicado a nivel personal y eso se ha
notado en las lecturas y en el ritmo del blog.
De hecho, aun se nota. Todavía no
le tengo las ganas de antes, pero bueno todo se andará.
En cuanto a libros, creo que leí unos ochenta y tantos (ya
no recuerdo el recuento final, pero tampoco es algo que importe
demasiado). Como siempre, varié entre
narrativa, romántica, juvenil y misterio según mi estado de ánimo y lo que me
apeteciera en ese momento.
Hubo de todo, bueno, malo y regular (como debe ser, si hay
criterio).
Entre lo mejor del año me quedo con Marisa Sicilia, Vítor
del Árbol, Anne Brönte, Angelika Schrobsdorff,
Margaret Atwood, Stefan Zweig.
Estos autores me han aportado momentos de auténtica alegría lectora, no solo
por sus tramas (Víctor del Árbol no es una fiesta precisamente), con ellos he
podido desconectar y disfrutar cada línea.
Recomiendo sus libros por su calidad y sus temáticas.
Me gustaría destacar: La
extraña desaparición de Esme Lennox, ¡Piratas!,
Peter Pan, El baile, La librería, los dos libros publicados de la
trilogía de La ciudad blanca, Mujeres
excelentes, Una habitación propia y
Algo alrededor de tu cuello...y me dejo otros, lo se. Libros
que no podía dejar fuera de ningún modo ya que han sido especiales. Muchos han representado una sorpresa, como
Piratas o Peter Pan. Otros la
confirmación de que la literatura británica siempre será lo mío, como es el
caso de La librería o Mujeres excelentes.
No se, cada uno tiene su punto y tenían que estar aquí.
Autores y libros con los que me
quedo, los que recuerdo más. También
están A las ocho en el Thysen, esa
incursión de Nieves Hidalgo en la novela romántica actual que espero no sea la última ya que la he disfrutado y La tentación vive arriba, una novela con un humor delicioso. Ambas fueron, en su momento
de lectura, justo lo que necesitaba y por esto no podía dejarlas fuera.
Luego tenemos las juveniles/New Adult, con Armentrout a la cabeza, pero ahí hay más de lo de siempre y solo unos pocos se libran de repetirse. Así que este año, con pena, no destaco nada.
Luego tenemos las juveniles/New Adult, con Armentrout a la cabeza, pero ahí hay más de lo de siempre y solo unos pocos se libran de repetirse. Así que este año, con pena, no destaco nada.
La verdad es que el panorama está un poco triste en algunos
géneros, un tanto repetitivo y noto que no me consigue emocionar como antes. Además, en la trastienda se ven cosas que ahora
mismo ni quiero ni necesito. Así que prefiero ir a lo mío y disfrutar de lo que
realmente importa.
No consigo entender mucho de lo que se monta en este mundo blogger/escritor/libro ultimamente. Hay un "ruido" extraño que no me va demasiado. Los grupos ya los viví en el colegio y ahora no me apetece pasar por ello otra vez, no hay ganas y a veces, tengo la impresión de que esta enorme red social es como una especie de patio que propicia esos grupos y me da pereza.
Los libros son algo mas que eso. Se supone que con ellos nos entretenemos, nos divertimos, aprendemos, empatizamos y desarrollamos ciertas capacidades que nos pueden ayudar en nuestro día día. Así que, para mí leer siempre será lo mas importante junto con compartir, cuando pueda, lo que he leído.
Espero que 2018 sea bueno en lecturas y mejor en la vida, para todos.
¡Nos leemos!