jueves, 14 de abril de 2016

Reseña: Serie Las reglas del juego de Anna Casanovas






Título: Serie Las reglas del juego (Las reglas del juego/Cuando no se olvida/ Donde empieza todo/Fuera de juego)
Autor: Anna Casanovas
Editorial: Harlequin Ibérica
Num pags: entre las 207 y  118











Sinopsis
Las reglas del juego (primer libro de la serie)

Susana Lobato tiene la vida perfectamente planeada y está a punto de conseguir todo lo que quiere: va a tener su propio programa de noticias económicas y en dos meses va a casarse con un hombre maravilloso. Pero una noche Tim anula la boda y la abandona para perseguir un sueño que no la incluye a ella.
Kev MacMurray acaba de cumplir treinta y cinco años y siente que ha llegado el momento de dar un cambio a su vida. No sabe por qué, pero últimamente se está asfixiando y está convencido de que no puede seguir donde está. Lo único que lo retiene es la boda de Tim, su mejor amigo.
Pero Tim anula la boda y una noche Kev coincide con Susana y respira por primera vez en mucho tiempo.
¿Por qué no le había sucedido antes? Se suponía que él y Susana no se soportaban ¿Desde cuándo siente que si no besa a la prometida de su mejor amigo no podrá seguir respirando?
Susana nunca había reaccionado así con nadie. ¿Puede correr el riesgo de averiguar qué pasará si se entrega a Kev?
Y qué pasará si vuelve Tim, ¿podrán dar un paso atrás?


Opinión

He decidido no poner las sinopsis de los otros libros para no destripar las historias ya que, aunque son tramas independientes, al salir personajes comunes se pierde un poco la emoción si se leen desordenados.  Mi recomendación es empezar desde el primero.

Decidí ponerme con esta serie de libros ya que llevaban tiempo rondándome, además necesitaba algo que me entretuviera y tuviera garantías mas que suficientes de que me iba a gustar y hasta ahora Anna Casanovas no me suele fallar.  Comencé a leerla con una serie de libros de romántica histórica que figuran entre mis favoritos,  seguí con ella en actual y qué queréis que os diga, mantiene el ritmo.

¿Con qué nos encontramos en esta serie?:



En Las reglas del juego conocemos a Mac y a Susana, dos personas que en un principio parecen odiarse.  Mac es el mejor amigo de Tim, prometido de Susana y compañero en los Boston Patriots.  Tras ser abandonada por Tim, la relación de Mac y Susana se hace más cercana para sorpresa de ambos.   
En esta novela la pasión, la fuerza de los personajes y la manera de narrar de Anna,  ya nos marca el camino de las siguientes entregas.  Además nos sirve para conocer a quienes serán los protagonistas de  las siguientes tres entregas, ya que todos en mayor o menor  medida salen aquí (salvo el protagonista masculino de la última entrega).
Buen comienzo de serie que me llevó a querer leer el segundo casi sin haber terminado la última página de este.  Es cierto, que a veces el personaje de Mac puede resultar pasional en exceso y un tanto posesivo, con eso de "no quiero que otro hombre te toque" pero no resulta insultante, como sucede con otras novelas.  Realmente sus escasas 207 páginas se leen en nada.



Pese a que en la primera historia sabemos lo que ocurre con los protagonistas de Cuando no se olvida, lo realmente importante de la novela es ver cómo se conocieron y qué ocurrió con la historia de Tim y Amanda hasta llegar al punto en el que les conocemos en Las reglas del juego.
Anna Casanovas tiene el talento de involucrar al lector hasta el punto de querer saber el cómo aunque ya sepa el final.  La dulzura de los sentimientos de ambos en el inicio de la relación, la forma de retratar los distintos puntos de vista según avanza el tiempo, las relaciones familiares… todo hace que esta historia sea especial.


Pero no se puede  decir que nos encontremos ante una serie centrada en el mundo del fútbol americano, tal y como podría parecer por los protagonistas masculinos de las dos primeras historias, esta serie nos lleva por distintos escenarios.
En Donde empieza todo la autora da un giro, haciendo que el lector se introduzca en un mundo totalmente inesperado de persecuciones e intrigas,  que Anna Casanovas  domina a la perfección. 
A Harrison, lo habíamos conocido de pasada en el primer libro de la serie y en esta novela presenta una faceta que sorprende, al igual que una trama muy alejada de la planteada en un principio.  Solo tiene en común el tema político que rondan a las familias de ambos jugadores.
Creo que este es uno de los grandes aciertos de la serie, no centrarla solo en un ámbito.



Fuera de juego es como una especie de regalo, no se si a los lectores o a dos personajes que se merecían un buen final.  Ambos nos han dado juego en historias anteriores y llamado la atención lo suficiente para tener su novela, además me ha gustado que la autora les juntara a ellos precisamente.  Pam es un mujer fuerte con ciertas debilidades y Ben necesitaba tener alguien así a su lado.
Es el que menos es disfrutado, pero aun así ha sido una delicia leerlo. 
El problema ha estado quizá en su extensión y en el drama del pasado de Pam con el final feliz.  No se, no lo he podido disfrutar del todo, pese al gran trabajo narrativo de la autora.  Pero eso si, el cambio de escenario a la hermosa Cerdeña resulta cuando menos refrescante.



La serie en definitiva, es un grupo de novelas de no muy larga extensión y que es una agradable lectura no exenta de algún que otro fallo, como unos personajes demasiado apasionados en ocasiones, que pueden resultar excesivos en sus celos , o el consabido mal entendido para dar intriga al final de la historia...Pero en general, estamos ante unas historias que hacen que te impliques con los personajes , con unos secundarios que hacen más ricas las tramas y con el lenguaje siempre apropiado de la autora.   

Nunca me cansaré de recalcar la facilidad de Anna Casanovas para usar las palabras en el momento adecuado.  En sus novelas una palabra vulgar o un insulto, no chirría, una palabra elegante no queda recargada.  Esa es una capacidad que algunas  autoras están perdiendo o no usan lo suficiente.  Y sí, también en novelas menores es necesario usar un buen lenguaje.

Una buena recomendación, desde luego.




Estantes de papel