Títulos: Cómo ligar con un duque/ Cómo conquistar a un Lord/
Cómo seducir a un millonario
Autor: Megan Mulry
Editorial: Plaza & Janés
Género: Romance actual
Estos son los tres únicos libros de la serie traducidos a nuestro
idioma (1,2,4, el tercero se perdió por el camino). Lo cierto es, que el primero lo leí cuando
salió y esta ha sido una re lectura que me ha ayudado a ver algunas de las cosas
que se me pasaron la primera vez. Ya se sabe
que a veces el tiempo es un buen juez.
Vamos a ver qué me han parecido los libros.
-Cómo ligar con un duque
Es muy posible que Bronte , una chica guapa, inteligente y
ambiciosa, siga con interés los vaivenes de la familia real británica para
olvidar sus propios fracasos sentimentales, y por ello también decide centrarse
en su exitosa carrera de publicista. Pero un día, entre los atiborrados
estantes de una librería, conoce a Max Heyworth, un hombre muy atractivo con un
marcado acento británico.
Max está en Estados Unidos cursando un posgrado y solo le
quedan tres meses para terminarlo, así que Bronte decide disfrutar con él de
una aventura corta y sin ataduras. Sin embargo, cuando Max tiene que volver a
Inglaterra antes de lo previsto, le declara su amor. Y por si fuera poco,
descubre que su pretendiente es ni más ni menos que ¡el hijo del decimoctavo
duque de Northrop!
-Como conquistar a un
Lord
Sarah James, hija de un magnate de los negocios de Chicago,
se trasladó a París durante la adolescencia. Allí se introdujo en el mundo del
diseño y la moda y hoy, a los veinticinco años, es propietaria de una línea de
calzado de lujo con el que sueñan muchas mujeres. Sarah ha pasado todo este
tiempo centrada en su carrera, un poco acomplejada por su figura... y
completamente virgen. Pero durante la boda de su mejor amiga con el
decimonoveno duque de Northrop, conoce a alguien y decide que ha llegado el momento
de cruzar esa frontera. El elegido es lord Devon Heyworth, el hermano menor del
novio, un joven muy apuesto con reputación de mujeriego que se apunta de buen
grado al fin de semana de pasión «sin compromiso» que acuerda con Sarah. Sin
embargo, lo que empieza como una aventura pasajera se convierte en algo más, y
una serie de malentendidos amenaza con dejarlos a ambos con el corazón hecho
añicos. ¿Conseguirán sus entrometidos amigos y familiares encarrilar la
situación y permitir que el amor triunfe?
-Cómo seducir a un millonario
Abigail Heyworth, hermana del decimonoveno duque de
Northrop, tiene acostumbrada a su familia y amigos a los dictados de su corazón
rebelde y aventurero, y hace tiempo que a ninguno de ellos le sorprende su
estilo de vida. Pero últimamente es la propia Abby quien no consigue
comprenderse a sí misma. ¿Cómo es posible que alguien como ella, una hippie de
la cabeza a los pies, se sienta atraída por Eliot Cranbook, un magnate
estadounidense del mundo de la moda que le lleva diez años?
Tal vez la culpa la tuvo la isla del Caribe donde su hermano
celebró su boda y cuyo entorno paradisíaco compartieron durante unos días los
invitados. Allí fue donde ambos conectaron pese a ser tan distintos, donde Abby
decidió robar un beso de los labios de Eliot, y donde se dio cuenta de que se
abría ante ella todo un mundo de deliciosas perspectivas para el que quizá no
estaba preparada.
Cuando leí Cómo ligar con un duque por primera vez me
pareció una novela fresca y divertida, venía de leer bastante novela histórica
y alunas actuales de tintes bastante distintos, así que era normal que me lo pareciera. Ahora en esta segunda lectura, me sigue
pareciendo divertida aunque menos fresca.
Megan Mulry ha montado unas historias cogiendo bastantes
estereotipos de las novelas clásicas románticas y las ha traído al mundo actual
consiguiendo el toque divertido. Claro
que su humor puede no llegar a todo el mundo.
En la primera historia la protagonista puede cargar un poco con sus dudas y su carácter. A mi no es
que me encante, pero si la entiendo y me ha hecho pasar ratos divertidos. Bronte es una chica a la que ha dejado el típico
chico americano “buenorro” y que ahora solo busca el típico chico de “transición”
(es todo tan de serie de sobremesa tipo diálogo de Friends, etc...), pero en su
camino se cruza Max con su flema británica, su humor y su atracción impactante
y no sabe qué hacer. Mas tarde para
colmo se entera de que es un Lord y ¿qué va a hacer ella, un típica chica
americana con un Lord inglés de los que solo sabe cosas por las novelas
románticas y las revistas de cotilleos? (este punto es el que da el toque
irónico al tema y el que me hacía sonreír).
La novela tiene su encanto por el retrato de personajes, por
sus cosas tópicas pero encantadoras, pero ya veis, tampoco es tan maravillosa como me
pareció en la primera lectura. Eso sí,
se lee fácil gracias a los secundarios y la curiosidad que te produce el querer
saber cómo reflejará la autora a esa sociedad británica que tan arcaica parece a veces, ya que el final todos lo
conocemos ¿o no?
En cuanto al segundo de la serie, Cómo conquistar a un Lord, me gustó bastante menos debido a unos
personajes que si bien, como secundarios de la primera me llamaron mucho la
atención, aquí como principales me aburrieron soberanamente. El esquema de la trama varía bastante poco,
pero eso si es sostenido por caracteres con algo de gracia no está del todo mal
y se puede soportar. El problema aquí
radica en que tanto Sarah como Devon han perdido todo el brillo que tenían (por
lo menos para mi) y se han convertido en dos personajes grises sin la menor
chispa.
Lo terminé por pura cabezonería y debido al personaje de
Abby, que si que me llamaba la atención.
En Cómo seducir a un millonario la cosa mejora con respecto al
segundo de la serie y es gracias sobre todo, a que la autora ahonda un
poco más que en los anteriores en los personajes, en sus relaciones y en su familia. Aquí conocemos más la relación de Abby con
su madre e incluso sabemos algo de esa figura que en otras novelas parecía como
un ser oscuro y sin sentimientos. Del mismo
modo, también conocemos la relación de amistad de Abby y Tully algo que me ha
gustado, ya que demuestra un tono de madurez del personaje.
Si bien es cierto, que en los tres libros el esquema de la
narración es prácticamente el mismo, en este gracias a estos cambios, a esta
pequeña evolución en cuanto a los personajes, ha conseguido que me guste un
poco más.
Para mi, la Serie Amantes reales se queda en unos libros
entretenidos, con buen sentido del humor y bastantes altibajos. Unos libros que podrían haber
dado mas de lo que dan y con unos personajes que mejor perfilados habrían sido
inolvidables.