martes, 28 de abril de 2015

Doctor Who, viajando en la Tardis



Para inaugurar esta sección de "Pelis y Series", he elegido una de mis favoritas de los últimos años, Doctor Who.
La vi por casualidad, sin saber bien qué iba a encontrarme.  Los efectos especiales eran puro cartón piedra, pero con un encanto tan especial que me conquistaron desde el primer capítulo.   Así que, esta serie británica sobre un hombre que viajaba en una cabina de policía de los años sesenta más grande por dentro que por fuera,  ha sido uno de mis mayores entretenimientos en muchas tardes aburridas.
Pero ¿quién es el Doctor? Un Señor del Tiempo, o más bien el último Señor del Tiempo.  No queda nadie de su mundo, es la última criatura de una raza tan poderosa como peligrosa.  Un hombre que viaja por el universo y el tiempo ayudando a los demás, pero que posee muchas facetas y sombras en su interior.  El Doctor no muere, se regenera, cambia de rostro y con el también su personalidad, otro nuevo Doctor nace cada vez.  Yo me topé con el noveno, pero “mi doctor” siempre será el décimo.  Ahora estamos en la duodécima regeneración, un personaje más oscuro con nuevas batallas que librar.


La serie comenzó a emitirse en 1963 por la BBC en un intento de llevar un poco de ciencia a los jóvenes, aunque poco a poco se volvió más fantástica.  Los episodios emitidos de 1963 a 1989, se consideran los “clásicos” dentro de la serie y abarcan ocho regeneraciones del Doctor.  La audiencia baja hizo que fuera desapareciendo, hasta que en 2005 regresó con el noveno Doctor y su acompañante Rose Tyler.
“Doctor Who” ha cumplido 50 años, convirtiéndose en la serie más longeva de la televisión y la cadena lo celebró con un especial en la que aparecían algunos de los antiguos Doctores.  La verdad es que estuvo muy curioso.
Muchos actores británicos han participado en la serie, caras que hemos visto en series como “Downton Abbey”, “Outlander, “Urgencias”, “Life on Mars” y también en el cine.

Pero ¿qué es lo que me gusta?

Ufff… son muchas cosas.  Es cierto que de buenas a primeras puede resultar chocante, pero si te sientas tranquila y ves un par de episodios  (siempre y cuando te guste un poco este tipo de series con algo de fantasía), te verás inmersa en un mundo un tanto peculiar y distinto.  Además, cuenta con un
sentido del humor muy británico, aunque esto es algo que he ha
El décimo Docto y Donna conocen
a Agatha Christie
perdido un poco en los doctores once y doce.  Es una serie hecha para toda la familia, con tramas que van desde la fantasía casi de cuento, a la ciencia ficción, la literatura, la historia, el terror… El imaginario de Doctor Who es casi ilimitado.
Con el tiempo los efectos especiales han mejorado, estoy segura que a las personas que han conocido la serie por el undécimo doctor les chocarán mucho algunos de los personajes de la época del noveno o el décimo, pero lo compensaban unos guiones tan maravillosos como el del episodio de “Blink”, los especiales de Navidad, o la despedida del décimo Doctor entre otros.  Momentos de humor, como aquel en el que bromeaban con el hecho de que el posible problema de la familia real británica no fuera la hemofilia, sino que la reina Victoria fue arañada por un hombre lobo y de ahí la peculiaridad de algún que otro miembro real.

Mi etapa con Doctor Who


- Los doctores
Comencé  a verla cuando Christopher Eccleston encarnó al noveno Doctor.  Esté actor me gustaba desde que le vi en la película “Jude” junto a Kate Winslet y, aunque pudiera resultar chocante, realizó un gran trabajo encarnado al noveno Señor del Tiempo.  Fue solo una temporada, pero la aparición de Rose Tyler y sobre todo del capitán Jack Harkness  fueron muy importantes.
Luego llegó el que sería “mi doctor”, David Tennant,  que estuvo cinco años.  Años llenos de episodios  fantásticos, de especiales de Navidad inolvidables donde los Papá Noeles  eran capaces de intentar destruir Londres, episodios con un humor hilarante y llenos de carreras.  David Tennant es un gran comediante lleno de energía, pero también fue capaz de encarnar a la perfección el lado oscuro del personaje, que es muy grande. Y sobre todo es la época de los episodios con “The Master”, interpretado por John Simms. 
Matt Smith entró en el 2010 para ser el undécimo.  He de decir, que siempre tuve ciertos problemas con él en el personaje, aunque los capítulos en los que sale Rory y River son fantásticos. 
Hace un año Peter Capaldi, que ya apareció  en la época Tennant, es el duodécimo Doctor.  Vistos algunos capítulos,  no me terminan de convencer las historias y cómo se ha enfocado el personaje.  Peter Capaldi es un gran actor que podría aportar mucho más y es una pena.

-Los acompañantes.  
El Doctor no viaja solo, siempre tiene alguien a su lado y a lo largo de estos diez años tengo muy claro cuales son mis favoritos.  Mucha gente adora  a Rose Tyler, el amor del décimo.  Su historia fue muy tierna y dramática, llena de capítulos divertidos e inolvidables.  Pero para mi, es Donna Noble, por su amistad inquebrantable y gran lucidez.  Era capaz de ponerle las cosas en su sitio sin dejar de admirar su grandeza.  Y por supuesto Jack Harkness,  el Capitán Jack de Torchwood, gran spin-off del que algún día hablaré y que tan horriblemente masacraron en EEUU.

-Los villanos
Unos avanzan al grito de "Exterminate", otros hacían retumbar sus pasos metálicos, el Silencio era aterrador, los Ángeles llorones nos harán plantearnos el parpadear ante una estatua alada... Hay villanos clásicos y nuevos, unos con apariencia casi sesentera y otros ciertamente aterradora.  Pero como dijo en un capítulo el Doctor, el ser humano puede estremecer en algunas ocasiones.

Así que esto y mucho mas,  es lo que se puede encontrar en Doctor Who.  Una serie que ha dado la vuelta al mundo,  que en su 50 aniversario consiguió que su capítulo especial se proyectara en cines de muchos países (incluida España), donde acudieron multitud de seguidores que se llaman así mismo whovians y que organizan eventos y tienen sus propias webs.
Realmente, merece la pena perderse en su mundo y quizá, alguna que otra noche mirar al cielo buscando entre las estrellas alguna cabina azul.



¡Hasta otra!