Título: Nunca volverás
Autor: Hans Koppel
Editorial: Planeta
Año de publicación: 2012
Sinopsis
Mike Zetterberg, su esposa Ylva y su hija Sanna viven en
Helsingborg, en el sur de Suecia. Cuando una tarde, tras el trabajo, Ylva no
regresa a casa, su marido deduce que está con sus compañeros tomando una copa.
Pero a medida que pasan las horas su preocupación va en aumento. Ylva se ha
esfumado sin dejar rastro. Pasados u nos días, la policía investiga el entorno
de la desaparecida y sigue de cerca los movimientos de Mike, que pasa a ser el
principal sospechoso. Para él, la vida se convierte en un infierno: no sólo
tiene que demostrar su inocencia, sino también coger fuerzas para sacar
adelante a su hija a pesar de su desasosiego y su desconcierto. Lo paradójico
es que Ylva está secuestrada a pocos metros de allí, en la casa de sus vecinos;
esa pareja mayor que se mudó hace unos meses al barrio y que parece tan
normal..
Opinión
De vez en cuando me entran ganas de leer thrillers o novelas
negras de manera imprevista, se podría
decir que por impulso. Y lo más
gracioso del tema es, que suele ser casi siempre por la misma época. Así que, un día que salía de comprar en unos
grandes almacenes, me topé con este libro de oferta en una pequeña
librería y no me pude contener tras leer
la sinopsis.
En "Nunca volverás", me he encontrado con una historia que hunde sus raíces en un
suceso muy doloroso del pasado que hace que, las víctimas no sean tan inocentes
y los verdugos nos planteen serias dudas.
Hans Koppel presenta una sociedad fría, llena de sospechas,
de suposiciones que llevan a que la desaparición de una mujer no se convierta
en algo sospechoso hasta que ya es tarde.
La propia vida de Ylva contribuye a ello, su relación con Mike no es
perfecta y convierte a este en una
especie de muñeco objetivo de las burlas y sospechas de todos.
Luego están los malvados, dos personas con un objetivo claro
y una mente retorcida que nos hacen plantearnos, qué habríamos hecho nosotros en
su lugar.
La novela tiene una narración ágil y fluida gracias a unos
capítulos cortos en donde prima la acción.
No es una novela donde se ahonde en la investigación policial, de hecho
la pareja encargada del caso queda en bastante mal lugar. El mayor peso de las pesquisas es llevada por
un periodista, compañero de algunas de las víctimas, que ve algo extraño en lo
que allí acontece.
Es una novela que mantiene un buen ritmo e intriga, pero me
ha costado su avanzar en ella debido, al tono de las vejaciones a las que es sometida el
personaje de Ylva. Es una novela dura en
ese sentido y no cierra los ojos ante una realidad que existe.